lunes, 19 de mayo de 2014

Aristóteles y su mirada sobre la Política


 Aristóteles puede ser citado como un realista. Aplica en las ciencias humanas lo mismo que siguió en las Ciencias Naturales. Lo que existe es lo que percibo en ello tiene la dimensión material y la esencial.
Pero al igual que Platón reconoce la primacía de la idea moral sobre la realidad.
En el marco de sus ideas políticas establece que el fin (toda su ética y política es de fines) es el bien común y la felicidad. Pero esa felicidad se alcanza solo a través de la razón dado que la actividad mas alta que puede alcanzar una persona es la contemplativa.


Respecto al origen y constitución de la sociedad mantendrá, al igual que Platón, la teoría de la "sociabilidad natural" del hombre. El hombre es un animal político (zóon politikon), es decir, un ser que necesita de los otros de su especie para sobrevivir; no es posible pensar que el individuo sea anterior a la sociedad, que la sociedad sea el resultado de una convención establecida entre individuos que vivían independientemente unos de otros en estado natural: "La ciudad es asimismo por naturaleza anterior a la familia y a cada uno de nosotros".

A Aristóteles debemos la primera clasificación de las formas de gobierno, en función del número de gobernantes. Así, la monarquía se caracteriza por el gobierno de uno, la aristocracia por el gobierno de pocos, y la república por el gobierno de la mayoría (en otras ocasiones «todos»); por el contrario, degeneraciones suyas son: de la monarquía, la tiranía; de la aristocracia, la tiranía; y de la república, la democracia (en otras ocasiones habla de demagogia).

De cualquier manera y salvando el contexto histórico Aristóteles tiene una mirada clasista sobre quienes pueden ejercer el gobierno. Solo los ciudadanos virtuosos dice pueden gobernar, excluyendo a los artesanos, labradores y comerciantes debido a que estos no poseen ni la razón ni la educación para llegar a la verdad.Pero por sobre todo ignora cualquier participación de las mujeres dado que la considera un hombre incompleto.
Cuando habla de Democracia advierte del peligro de lo que llama demagogia, quizás entendiendo el peligro de una forma de gobierno de “contaminarse” con los intereses y expectativas de las mayorías.
Como se ve no todo lo que brilla es oro en el pensamiento de los grandes, pero siempre hay que mirar el contexto histórico en cuál se expresaron.
También podríamos llegar a inferir que esa mirada elitista sobre el gobierno puede tener hoy alguna correlación, cuando sectores económicos y mediáticos quieren suplantar con su poder a quienes fueron elegidos por la voluntad popular.

Miguel Tanos